
La Hyundai Creta supo ganarse su lugar en nuestra región. Si bien por cuestiones de cupos de importación, aún no se ven muchas unidades de la segunda generación, en Brasil y otros países sí mantiene una gran aceptación a pesar de su diseño un tanto polémico por su llamativo sector frontal. Decidida a mejorar su imagen y de paso alinearla con los últimos productos presentados por la compañía, la firma coreana presentó en México el restyling del B-SUV que había sido develado en Indonesia el año pasado.
La renovada Creta deja de lado la estética conocida del modelo brasileño y apuesta ahora por un rediseño que busca asemejarla a su hermana mayor, la Tucson, lo que hizo que todo el frente sea modificado. Tal como lo anticipaban las recreaciones, la Creta adopta una enorme parrilla en forma de V que se extiende hacia las luces diurnas de Led, mientras que los faros principales estarán ubicados más abajo, con un diseño más estilizado. Como detalle extra, la parte inferior de la parrilla y el paragolpes agregan un aplique en color aluminio que lo destacan aún más, aunque algunos señalan cierto parecido con el nuevo Mitsubishi Outlander. De esta manera, el Sport Utility ganará una imagen más moderna y agraciada. De perfil, sólo recibió nuevas llantas de aleación y un aplique en el mismo tono que el del sector frontal al igual que en el paragolpes trasero.
Puertas adentro, el tablero luce trazos más rectos, destacándose la enorme pantalla táctil ubicada en posición vertical, cuyo marco se extiende sobre la consola central e inferior, hasta el túnel central. Como novedad, al menos para el mercado indonesio, incorporó un instrumental 100% digital con un display de 10,25”. Sistema multimedia con pantalla táctil de 8” compatible con Android Auto y Apple CarPlay sin cables, techo solar, iluminación ambiental, control de velocidad crucero adaptativo, frenado autónomo de emergencia, asistente de mantenimiento de carril y detector de fatiga forman parte del listado de equipamiento, ítems que también están presentes en la versión producida en Brasil.
Otro cambio importante se da en su motorización: llamativamente, en México sólo será ofrecida con un austero motor naftero 1.5 de 115 CV asociado a una caja automática CVT, tal como se produce en Indonesia, dejando de lado el propulsor 1.4 T-GDI de 140 CV que utilizaba la serie anterior.
El restyling por ahora sólo será comercializado en el país azteca, habrá que ver si más adelante el modelo producido en Brasil también incorpora este rediseño o sigue apostando por una estética propia.
Estetica dificil de digerir , motorizacion excelente .