Hace un par de semanas atrás, Audi comenzó a preparar el terreno para la presentación del Q8 con una serie de videos –una suerte de cortometraje de acción que tiene a su nuevo producto como protagonista- y teasers (ver nota) que se irán develando poco a poco hasta su fecha de estreno mundial, prevista para el 6 de junio.
Dejando de lado la historia de ficción, esta vez nos vamos a enfocar en el segundo boceto publicado recientemente por la marca de los anillos, un teaser que muestra cómo será la parte frontal: se destacará por su imagen agresiva, con una gran parrilla frontal –single frame- ahora de forma hexagonal, con aspecto tridimensional y un marco de color grafito que se extiende hasta los faros y las tomas de aire inferiores, también de gran tamaño. También resaltan los trazos bien marcados del paragolpes y las nervaduras del capot, que le dan un aspecto más musculoso y dinámico al que será la nave insignia entre los SUV’s de la firma de Ingolstadt.
Desarrollado sobre la plataforma MLB Evo –la misma del Q7 o del Bentley Bentayga-, el Q8 representará una propuesta mucho más deportiva, con aspecto de coupé pero con un planteo que aparenta estar mejor resuelto que en sus rivales (BMW X6 y Mercedes-Benz GLE Coupé), especialmente en el remate posterior, según se pudo apreciar en el primer boceto divulgado por la marca.
La otra gran novedad es que contará con una mecánica semihíbrida o Mild Hybrid, compuesta por el motor diésel V6 3.0 TDI con la asistencia de un motor eléctrico de 48V, capaz de desarrollar alrededor de 449 CV y más de 600 Nm de torque, con un paquete de baterías de iones de litio de 179 kWh de capacidad. Así lograría una autonomía en modo 100% eléctrico de 60 kilómetros.