BYD comienza a posicionarse como uno de los rivales más difíciles y con mayor potencial para Toyota debido a su capacidad de desarrollo y producción, ganando terreno a nivel mundial. Sin embargo, en China es socia de la firma nipona y colaboró en la creación del nuevo bZ7 Concept, presentado en el Salón de Guangzhou.
Hermano mayor del bZ3, que también fue desarrollado por y para el Gigante Asiático, el bZ7 Concept anticipa al cuarto integrante de la gama beyond Zero. Por sus características, podríamos compararlo con el imponente Toyota Crown que fue lanzado recientemente en Argentina, tanto por su porte como por su posicionamiento.
A nivel estético, se nota claramente el parentesco con los demás integrantes de la gama bZ, especialmente en el sector frontal, con finos faros de Led en forma de C, unidos entre sí. No posee parrilla sino una toma de aire inferior bastante pequeña, ya que no requiere refrigeración como en un vehículo con motor de combustión. Donde más resalta el aire de familia con el Crown es en su silueta, siendo una berlina tipo fastback con un remate posterior alargado y que finaliza justo después de la luneta.
Por el momento, no trascendieron detalles técnicos del prototipo ni fotografías del interior. Se sabe que forma parte de una inversión de unos U$S 218 millones como parte de su joint-venture con BYD y que internamente se lo conoce como Proyecto 630D. Lo que corre por cuenta del fabricante chino es todo el tren motriz, desde el motor eléctrico –o los motores- hasta las baterías Blade.
El objetivo de Toyota es poder hacer frente a otras automotrices chinas y seguir creciendo en el mercado local, muy competitivo debido al rápido crecimiento de los fabricantes de ese país y no sólo de sus rivales occidentales. La versión de producción sería presentada hacia mediados o fines del año que viene. Por ahora no está prevista una variante global.