Con el nuevo C3 ya en los concesionarios argentinos y logrando un muy buen nivel de ventas en Brasil, Citroën se prepara para dar el próximo paso en su Proyecto C-Cubed, en el que prevé la presentación de un B-SUV para 2023 y un sedán para 2024. Al igual que el hatch/crossover, el proyecto nació en India, más allá de recibir una importante adaptación regional, es por eso que en el caso del Sport Utility las pruebas también están llevándose a cabo en el país asiático: el sucesor del C3 Aircross intensifica los test de rodaje y fue fotografiado una vez más en la ciudad.
En esta oportunidad, las imágenes corresponden a la web MotorBeam y, también como aquellas fotografías tomadas por The Car Show India, la unidad lucía un espeso camuflaje en su carrocería aunque ya se distinguen algunos de sus rasgos. Lo primero que salta a la vista son sus dimensiones, considerablemente más grandes que las del hatch. Si bien compartirán la plataforma CMP, en el caso del SUV el sector posterior es más alargado para ofrecer mayor espacio y la posibilidad de agregar una tercera fila de asientos para un total de 7 ocupantes. Cabe aclarar que esta es una configuración muy demandada en India y de hecho, su principal rival, el Renault Triber ofrece una versión de 7 plazas. Sin embargo, es posible que en nuestra región cuente con 5 asientos y el espacio de la tercera fila sea destinado al baúl. De acuerdo a medios de prensa del país asiático, el B-SUV mantendría la misma distancia entre ejes del bicuerpo -2,54 metros- pero sí tendrá más de 4 metros de largo.
A nivel de diseño compartirá rasgos y componentes con el hatchback. En las imágenes se llegan a observar los mismos faros delanteros y traseros, pilar A y pilar B e incluso las puertas. Sólo contaría con algunas diferencias en el frente –la toma de aire y hacia el pilar C y el remate posterior, con cierto aire al C5 Aircross. Como todo vehículo con estética aventurera, dispondrá de protecciones de plástico en los pasarruedas y barras de techo. Sí se llegan a notar llantas y neumáticos con una medida mayor, posiblemente de 16 pulgadas y con un perfil aún más alto que el del C3.
Mecánicamente, se espera que ofrezca las mismas motorizaciones del hatch, que en nuestro mercado se comercializará con el propulsor naftero PureTech 1.2 de 82 CV y el 1.6 VTi de 115 CV, asociados a una caja manual de 5 velocidades o a la caja automática Aisin de 6 marchas. En Brasil, el 1.2 es reemplazado por el Firefly 1.0 (aspirado). Considerando que su posicionamiento será superior al del C3, las versiones más equipadas podrían utilizar el Firefly 1.0 turbo de 120 CV, aunque no hay datos oficiales al respecto.
Por el momento tampoco se sabe cuál será su denominación, pero teniendo en cuenta que Citroën decidió mantener el nombre C3 para el hatchback/crossover, su derivado B-SUV podría llamarse también C3 Aircross. Replicando la estrategia del C3, su derivado Sport Utilituy sería presentado primero en India a mediados de 2023, mientras que a nuestra región arribará hacia finales de año, producido en la planta brasileña de Porto Real.