Esta semana recorrimos la bellísima Ruta de los 7 Lagos entre Villa La Angostura y San Martín de los Andes junto a Eximar –representante de Volvo en Argentina- probando la XC90 T8 Recharge, una experiencia de la que pronto vamos a brindar más detalles. En ese mismo evento, la marca explicó su estrategia de electrificación y confirmó sus intenciones de presentar el C40 Recharge –su SUV Coupé 100% eléctrico- a fin de año. Casi en simultáneo, en Europa se dieron a conocer los resultados de los crash test de Euro NCAP, en los que el producto de la firma sueca logró la máxima calificación de cinco estrellas.
Como ya se sabe, para Volvo la seguridad es una prioridad y es un aspecto en el que siempre se destacaron sus vehículos. El C40 no es la excepción y en ese sentido, obtuvo una puntuación del 92% en protección de adultos, 89% en protección infantil, 70% en protección a peatones y 89% en sistemas de asistencia a la conducción. Desde el organismo de seguridad resaltaron tanto el buen comportamiento de su estructura como el completo equipamiento disponible, lo que llevó a que el modelo alcanzara dichos porcentajes.
Develado a principios del año pasado, el C40 representa la apuesta de la marca en un formato que hoy por hoy es una tendencia, los SUV’s con estilo de coupé, con una apariencia más deportiva y remate tipo fastback. Basado en el XC40 Recharge, el sector frontal es prácticamente idéntico a este modelo, con los vistosos faros de Led con el Martillo de Thor como su firma luminosa. La parrilla está carenada al no necesitar tomas de aire para la refrigeración del motor. Lo distintivo está desde el pilar A hacia atrás: el C40 toma distancia de sus competidores con un diseño más original, trazos más redondeados y una línea de cintura que asciende de manera más abrupta hacia el pilar C. La parte trasera es la más novedosa del conjunto, con faros de Led que se extienden hacia arriba del portón. Mención aparte para el doble alerón, uno encima de la luneta y otro sobre la tapa del baúl. Estéticamente, resulta un modelo muy bien logrado, que combina un estilo moderno, sobrio y deportivo, sin llegar a una apariencia demasiado agresiva o recargada.
Puertas adentro, el tablero también es similar al del XC40, aunque con una ambientación propia, con materiales y terminaciones de notable calidad. El instrumental es 100% digital, cuenta con funciones específicas que brindan información sobre el rendimiento y la autonomía restante, mientras que el sistema multimedia fue desarrollado en conjunto con Google, por lo que utiliza un sistema operativo Android, integrando sus principales aplicaciones. Asimismo, tanto el sistema de infoentretenimiento como otros ítems tecnológicos del vehículo podrán ser actualizados de manera remota.
Desarrollado sobre la plataforma modular CMA, comparte con el XC40 Recharge sus dos motores de 150 kW –ubicados uno en cada eje-, que entregan una potencia combinada de 408 CV, así como también sus baterías de iones de litio de 78 kWh de capacidad. Con ellas puede lograr una autonomía cercana a los 420 kilómetros según datos oficiales, además de poder reabastecerse en un 80% en apenas 40 minutos utilizando un cargador rápido de hasta 150 kW de potencia.
