
Festejo doble para MINI: por un lado, la firma británica está celebrando los 60 años del modelo diseñado por Alec Issigonis y por otro, acaba de lograr un hito productivo muy importante, haber llegado a las 10 millones de unidades producidas en la planta de Oxford.
La unidad protagonista de este hito es precisamente un MINI Cooper 60 Years, la edición especial creada como homenaje a sus seis décadas de historia y que se destaca por su estética típicamente inglesa, con el icónico color British Racing Green IV de su carrocería, contrastando con el techo y las franjas sobre el capot negro. También cuenta con llantas de aleación de 17 pulgadas de diseño específico y el emblema 60 Years en varias partes de la carrocería así como en el interior. Vale recordar que esta edición especial también llegará en los próximos meses a nuestro mercado.
El complejo industrial de Oxford sigue siendo la fábrica más representativa para la marca, cuna de sus orígenes humildes ya que allí comenzó a producirse el MINI original desde 1959 junto con sus derivados y la versión preparada por John Cooper. De aquel modelo se vendieron cerca de 5,3 millones de unidades hasta su discontinuación, a principios de 2000.
A partir de ese año, ya bajo el control del Grupo BMW, comenzó una nueva era para la compañía: su gama de productos fue completamente replanteada y salió a la luz el MINI Cooper “actual”, una reinterpretación del clásico pero con la última tecnología y el diseño contemporáneo.
De aquel “nuevo” MINI Cooper, ya pasaron dos actualizaciones y hacia finales de este año llegará un nuevo hito para la firma británica, con el comienzo de la producción del Cooper SE, la variante 100% eléctrica presentada recientemente.
De acuerdo a la marca, sólo en 2018 se comercializaron casi 400.000 unidades en los 110 países donde tiene presencia, con una gama que se fabrica en dos plantas: Oxford –para las versiones de 3 y 5 puertas junto con la rural Clubman- y VDL NedCar en Holanda, donde se producen el Cabrio y el SUV Countryman.