Nuevo Audi Q3 Sportback: compacto, estilizado y deportivo

Que los SUV’s están de moda no es ninguna novedad, este formato de vehículo está desplazando a los sedanes, monovolúmenes y coupés entre las preferencias del público y desde Audi lo saben muy bien. Es por eso que, en lugar de desarrollar, por ejemplo, una variante cuatro puertas del TT –que recientemente se supo que el proyecto quedó en stand by-, la firma de Ingolstadt está apostando fuertemente por su gama Q, que acaba de sumar un nuevo integrante: el Q3 Sportback.

El Q3 Sportback está pensado como la versión “con estilo de coupé” del Q3 de nueva generación y apunta a competir con el BMW X2 y el próximo Mercedes-Benz GLA. Aún así, los diseñadores de la marca de los cuatro anillos lograron darle identidad propia, con pocos detalles en común con su hermano más tradicional.

Por empezar, en el sector frontal se destaca la enorme parrilla Singleframe  que en lugar de detalles cromados cuenta con una terminación abrillantada de color negro y entramado tipo panal de abejas. A cada lado del paragolpes replantan las dos grandes tomas de aire –falsas- que le dan una imagen más agresiva, también en color negro. Completan este sector los vistosos faros Matrix Led con una firma luminosa en forma de flecha.

Pero lo más novedoso sin dudas es su vista lateral: dos trazos bien marcados  que se ubican por encima de los pasarruedas le dan un porte más musculoso, haciéndolo parecer también más ancho. Otro detalle a resaltar es el diseño del remate posterior o del pilar C, mucho más estilizado y que se diferencia de otros productos de Audi, con una línea de cintura que asciende hacia la tercera ventanilla en lugar de mantenerse recta como en otros modelos de la marca. El toque aventurero lo aportan las protecciones en plástico negro en los pasarruedas y la parte inferior de las puertas, que contrastan con las llantas de aleación de 18 pulgadas con neumáticos de perfil bajo, más pensados para el asfalto que para el off road.

La parte trasera también está muy bien lograda, con predominancia de trazos rectos, faros de Led que se extienden hasta el portón trasero –con una línea que dibuja un alerón como en muchos sedanes de Audi-. El paragolpes termina de redondear su imagen deportiva con una suerte de difusor en color negro, que cumple en realidad una función más estética que aerodinámica.

Contrariamente a lo que suele suceder con otros “SUV’s con aspecto de coupé”, el Q3 Sportback no resigna habitabilidad: mantiene la capacidad para 5 pasajeros –con los asientos traseros desplazables y abatibles-, así como el baúl de 530 litros de capacidad.

Puertas adentro es donde se nota realmente su parentesco con el Q3 convencional, ya que su diseño es similar, compartiendo el tablero y otros componentes. Allí, el protagonismo está dado por el instrumental 100% digital configurable por el conductor Virtual Cockpit, con display de 10,25 o de 12,3” según la versión. También la enorme pantalla táctil de 10,1” del sistema multimedia MMI compatible con smartphones y otros servicios. Para darle un ambiente más sport, cuenta con varios apliques en aluminio cepillado.

Mecánicamente, Audi ofrecerá una variada oferta de motorizaciones nafteras y diésel, comenzando por un 2.0 TDI de 150 CV y el 2.0 TFSI de 230 CV, disponibles con una caja manual de 6 marchas o automática S-Tronic de 7 velocidades, opciones de tracción simple o integral quattro. Más adelante, se sumará una versión con el motor naftero 1.5 TFSI de 150 CV con tecnología Mild-Hybrid y sistema eléctrico de 48V, así como las variantes S.

Su lanzamiento está previsto para noviembre en Europa para luego arribar a otros mercados. Su llegada a nuestro país aún no fue confirmada, pero estimamos que podría darse hacia mediados o fines de 2020.