Jeep es hoy por hoy una de las marcas más exitosas de la región, con un portfolio cada vez más completo y con sus principales productos fabricados en Brasil, lo que asegura una mayor disponibilidad y precios más competitivos. Uno de los responsables de este gran presente es el Compass, el segundo modelo en ser producido en la planta de Pernambuco luego del Renegade y que acaba de alcanzar las 400.000 unidades vendidas sólo en el país vecino.
El Compass es, actualmente y por mucha diferencia, el C-SUV más vendido en Brasil, con más de 35.000 unidades comercializadas entre enero y agosto, logrando una participación de mercado del 42,8% en su categoría, manteniendo el liderazgo nada menos que por sexto año consecutivo y a pesar de contar con rivales muy importantes como el Toyota Corolla Cross o la Volkswagen Taos.
Con su último restyling presentado en abril de 2021 y lanzado en Argentina a fines de septiembre de ese año, recibió una importante actualización a nivel general, con un replanteo bastante profundo en el sector frontal. Los faros fueron levemente rediseñados –ahora son más finos y cuentan con proyectores de Led- y la parrilla recibió nuevas terminaciones –cromadas o tipo diamante, según la versión-.
Las mayores novedades se encuentran en el interior, con un tablero completamente rediseñado y que anticipa el estilo que tendrán los próximos modelos de la marca. Las líneas más redondeadas y sobrias fueron reemplazadas por trazos más rectos y superficies más trabajadas, de aspecto tridimensional, con la plancha frontal revestida en cuero haciendo juego con los paneles de las puertas, nuevas salidas de aire y detalles en aluminio. En este sector se destaca la enorme pantalla táctil de 10,1” del sistema multimedia Uconnect. Por supuesto, mantiene los asistentes de conducción presentes en la serie anterior, con control de velocidad crucero adaptativo, frenado autónomo de emergencia y sistema de mantenimiento de carril, entre los principales ítems.
Mecánicamente, la otra gran novedad fue la incorporación del motor naftero Firefly 1.3 turbo (T270), que desarrolla 180 CV y 270 Nm de par y se asocia a la caja automática de 6 velocidades, manteniendo el propulsor turbodiesel 2.0 Multijet de 170 CV y 350 Nm de par, exclusivo para la versión Trialhawk. Mención aparte para la variante híbrida enchufable 4xe, que combina el motor naftero 1.3 turbo con uno eléctrico con el que desarrolla en conjunto 240 CV y puede recorrer hasta 50 km en modo cero emisiones.
Cuando la gente compra lo que quiere y no lo que hay disponible!!!