Finalmente, luego de algunos teasers y fotos espía, BMW presentó la nueva generación del X2, su SUV compacto que dio un importante giro para convertirse en un auténtico SUV coupé, con un estilo similar al de sus hermanos mayores, combinado con la impronta del X1, modelo del que deriva y con el que comparte numerosos componentes. La firma de Munich tampoco dejó de lado su estrategia de electrificación, ya que junto con él develó también a su variante 100% eléctrica, el iX2.
Comenzando por su diseño, el X2 sigue siendo uno de los productos de la marca con un estilo más arriesgado dentro de la gama de SUV’s, sin contar al excéntrico XM. En el sector frontal cuenta con faros de formato similar a los del X1, especialmente por su firma luminosa. En este caso, la parrilla del doble riñón, sin estar sobredimensionada, sí es más grande y puede contar con diferentes apliques e incluso estar iluminada. Por debajo se destaca una gran toma de aire de formato trapezoidal y con un marco de color negro brillante, además de los canalizadores de aire de los extremos y las marcadas nervaduras del capot.
De perfil, tal como señalamos anteriormente, la segunda generación del X2 ahora cuenta con la silueta típica de un SUV coupé, con el remate posterior más alto e inclinado. Las ventanillas mantienen parte del estilo de su antecesor, pero con el pilar C mucho más alargado hacia atrás. La parte trasera sí luce completamente diferente a otros productos de la marca, con un portón bastante plano hasta la luneta y con un alerón que conecta ambas piezas. Mención aparte para los faros, finos y alargados, con un diseño que no se parece en nada a otros modelos de la compañía.
Puertas adentro es donde más deja en claro su parentesco con el X1, ya que comparten el interior: el tablero tiene al BMW Curved Display como protagonista y está compuesto por dos enormes pantallas unidas entre sí para las funciones del instrumental y del sistema multimedia. Por debajo se ubica una salida de aire de formato trapezoidal y las del lado del pasajero se extienden a lo ancho de la plancha frontal. En lugar de comandos para el climatizador, en la consola posee una bandeja para apoyar el celular, que puede recargar su batería de manera inalámbrica. Asimismo, el apoyabrazos central se extiende hacia delante, dejado bien a mano la selectora y otros comandos.
Mecánicamente, hasta el momento fueron anunciadas varias opciones: el X2 estará disponible con la versión sDrive20i, impulsada por un motor naftero 1.5 TwinPower Turbo de 170 CV con tecnología mild-hybrid de 48V; sDrive18d, con un propulsor turbodiesel 2.0 de 150 CV, en ambos casos con una caja automática Steptronic de doble embrague y 7 marchas, con tracción delantera. Más adelante se sumarán opciones más potentes y con tracción integral.
Momento de hablar de la variante eléctrica: el iX2 está impulsado por dos motores –uno en cada eje y por lo tanto, con tracción integral- que entregan en conjunto 313 CV, alimentados por un paquete de baterías de iones de litio de 64,7 kWh de capacidad, lo que le permite lograr una autonomía de 449 kilómetros según el ciclo WLTP. Puede acelerar de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos y la velocidad máxima está limitada a 180 km/h.
Su llegada al mercado europeo está prevista para marzo del año que viene, mientras que su arribo a nuestro país debería darse meses después.
