La primera generación del Panamera fue bastante cuestionada por un diseño que no estaba tan bien logrado, aunque sí transmitía todo el lujo y la performance que un usuario de Porsche podía esperar, siendo además la primera berlina deportiva de la compañía, un formato que desde hacía varios años lo venía estudiando. Por supuesto la marca tomó nota y en su segunda generación, dio un gran salto en estética, así como también en tecnología. Siguiendo esa misma fórmula, la firma de Stuttgart acaba de presentar una nueva actualización a la que prácticamente considera como la tercera generación.
Al igual que con el Cayenne, que también recibió un facelift de media vida pero que internamente fue concebido como si se tratara de un nuevo producto, Porsche buscó mejorar punto por punto al Panamera y claramente lo logró: a nivel de diseño, se rediseñaron levemente los faros –ahora con tecnología HD Matrix Led-, inspirados en el Taycan, así como el paragolpes, con tomas de aire más grandes. Cambia además el diseño de las llantas de aleación, que pueden ser de 21 pulgadas monotuerca y agrega nuevos colores para la carrocería. El remate posterior también fue retocado, especialmente la terminación de las ventanillas en el pilar C y los faros traseros, muy similares a los del icónico 911. Como novedad, se agrega la opción Executive, de largo extendido, pasando de los 5.052 mm a 5.202 mm.
Donde realmente se notan los cambios es en el interior, allí nuevamente se refleja una clara inspiración en el Taycan, especialmente en el diseño del tablero y las salidas de aire. Cuenta con instrumental digital de 12,6” y una enorme pantalla para el sistema multimedia. Una característica típica del Panamera que sigue hasta el día de hoy es el túnel de transmisión elevado, que permite acceder a las funciones del vehículo u operar el climatizador de manera más cómoda. También agrega un tercer display de 10,9”, en este caso para el pasajero. Como era de esperarse, derrocha calidad, lujo, refinamiento y deportividad, con revestimientos de cuero/alcantara, apliques de aluminio y fibra de carbono. Dispone de conectividad Android Auto y Apple CarPlay con asistente Siri, asistente de velocidad activo con reconocimiento de señales de tránsito y estacionamiento autónomo, entre otros ítems.
Tal como señalamos anteriormente, para esta nueva generación, Porsche hizo énfasis en la electrificación: la berlina será ofrecida en cuatro versiones, Panamera con un V6 de 2.9 litros, que entrega 353 CV y 500 Nm, Panamera 4 que agrega tracción integral. La tercera opción es el Panamera Turbo E-Hybrid, que combina un V8 con un motor eléctrico alimentado por una batería de 25,9 kWh que entrega 680 CV y 930 Nm de torque, pudiendo circular hasta 91 kilómetros en modo 100% eléctrico. Más adelante se incorporará la variante Turbo S E-Hybrid, aún más potente y prestacional. En todos los casos, la transmisión es automática PDK de 8 velocidades y puede contar con la suspensión neumática adaptativa PASM o la nueva Porsche Active Ride, también neumática pero con amortiguadores activos.
