Las pick ups medianas van ganando cada vez más terreno en algunos mercados como nuestra región. Es por eso que son más las marcas que se interesan por ingresar a este competitivo segmento y la oferta es cada vez mayor: a las tradicionales Ford Ranger, Toyota Hilux, Chevrolet S-10 y Nissan Frontier, pronto se les sumarán la RAM Rampage (nombre aún sin confirmar), Peugeot Landtrek o Fiat Titano, por mencionar sólo algunas. Y no serán las únicas ya que Kia también quiere meterse en la pelea con su propia camioneta, desarrollada íntegramente por la firma surcoreana. Las pruebas comenzaron el año pasado y la marca avanza rápidamente con el objetivo de presentarla a fines del año que viene.
Así lo aseguran medios de prensa australianos haciendo referencia a fuentes cercanas a la marca que anticiparon que la pick up será develada durante el último trimestre de 2024 aunque recién llegará a los concesionarios en 2025, comenzando justamente por Oceanía, continente donde las camionetas tienen una gran aceptación y que apuntará a ser uno de sus principales mercados. Luego desembarcará en países asiáticos, África y por supuesto América Latina, donde deberá ganarse su lugar frente a sus rivales antes mencionados.
Para ello, Kia está trabajando arduamente en crear un producto a la altura de las circunstancias. Conocido internamente como Proyecto TK (Truck Kia), la pick up contará con un chasis de largueros convencional –no será monocasco como la RAM- y se espera que esté impulsada por el motor turbodiesel V6 3.0 CRDi del Mohave, que en el caso del SUV entrega 253 HP y 560 Nm de torque, acoplado a una caja automática de 8 velocidades, por supuesto con opciones de tracción 4×2 y 4×4. Asimismo, también podría ofrecer versiones híbridas, considerando que muchas de sus rivales –como la Ford Ranger, Toyota Hilux o Volkswagen Amarok- contarán con variantes de este tipo en sus próximas generaciones.
Tal como señalamos anteriormente, desde el año pasado la marca viene realizando test de rodaje con mulas de prueba construidas con componentes de varios productos de la firma surcoreana, especialmente del Mohave, del que toma todo el sector frontal y parte de la cabina. La diferencia está precisamente debajo de la carrocería, ya que como dijimos, contará con un robusto chasis de largueros, por lo que probablemente en aquellos tests se estaban realizando ensayos de la puesta a punto de la suspensión y del mismo chasis.
Vale recordar que no será la única pick up de Kia. Junto con este proyecto, también planea desarrollar una camioneta 100% eléctrica creada sobre la plataforma e-GMP pensada sobre todo para el mercado norteamericano. Esta diferencia apunta a que en los mercados emergentes la llegada de la electrificación será más lenta, por lo que será necesario ofrecer versiones con motor de combustión convencional y quizás una variante híbrida.