Test Drive Renault Kwid Iconic

Fue una de las presentaciones más importantes en un año repleto de lanzamientos de producto, que ya lo habíamos conocido en el Salón del Automóvil de Buenos Aires. ¿Por qué reviste tanta relevancia? Simplemente porque se trata del nuevo vehículo de entrada de gama de Renault y reemplaza a un modelo histórico y exitoso como el Clio, que se fabricó en Argentina hasta el año pasado.

El nuevo Kwid es un hatchback del segmento A (City Car) que llega importado de Brasil (también se produce en la India). Tuvo su preventa durante el mes de octubre y fue un verdadero suceso. Ahora ya se comercializa oficialmente en toda la red de la marca del rombo con cuatro versiones (Life, Zen, Intens e Iconic) y una única motorización 1.0 asociada a una caja manual de cinco velocidades.

Fue desarrollado bajo la plataforma global CM-FA (Common Modularity Family) de la Alianza Renault-Nissan y se fabrica en el Complejo Ayrton Senna, de Brasil. El  80% de las piezas de Kwid se crearon por Renault Tecnologías Américas, para cumplir las necesidades particulares del mercado de la región.

No queremos anticipar demasiado porque la idea es que nos acompañen en el recorrido de esta nota que les brindará detalles de sus características. Pero sí podemos darles algunas pistas para que lo vayan descubriendo. Es un auto chico con aires de SUV, por su diseño y despeje al suelo. El espacio interior es una de sus virtudes al igual que su privilegiada posición de manejo. Por otra parte, si tenemos en cuenta su precio y segmento, será un referente por la seguridad que ofrece.

La primera atracción del Kwid es natural que pueda llegar a través de sus rango de precios pero a medida que lo vayan conociendo comprenderán que no sólo es interesante porque resulta económico. Los invitamos a descubrirlo.

Diseño Exterior:

El Renault Kwid ya circula por las calles de Argentina y despierta miradas curiosas. Lo que hace realmente diferente a este Kwid es su estética de Sport Utility. Por algo desde la marca lo definen como «el más SUV de los compactos«. Es que su aspecto robusto, la mirada agresiva que presenta, su despeje al suelo de 18 centímetros (el mayor del segmento) y su extensión (3,68 metros) que lo definen como el más largo, le proporcionan esta identidad con aires de todo terreno.

Las formas del auto fueron elaboradas por el Centro de Diseño de Renault en Francia en conjunto con el Renault Design América Latina. El ADN lo conserva intacto ya que adopta en su silueta rasgos comunes de sus hermanos mayores Stepway, Duster, Koleos y Captur; en sus líneas, ángulos de paragolpes, capot, parabrisas y la caída del techo.

En la zona frontal se destaca su parrilla que simula un formato de cadena que, según nuestra subjetiva percepción, le confieren una sensación de fortaleza. En este contexto, también le sientan muy bien los faros antiniebla con base negra y la toma de aire inferior. Respecto a las ópticas, no hay demasiada innovación, calzan casi perfectamente en la trompa sin invadir laterales.

Los guardabarros están acentuados con los plásticos negros que los rodean tanto adelante como atrás. A su vez, las líneas asciendan desde adelante hacia atrás con un trazo sobre la parte baja de las puertas junto a un aplique adhesivo de estilo deportivo que combina el color de la carrocería con negro. Si bien sus llantas son de chapa las mismas se encuentra cubiertas por unas tasas de agradable diseño que imitan perfectamente a las de aleación y que hay que acercarse y tocarlas para comprobar que no lo son. Son de 14 pulgadas y se encuentran calzadas con neumátcios de medida 165/70-14.

El remate del vehículo no pierde relevancia, todo lo contrario, le otorga personalidad y distinción con dimensiones bien proporcionadas. La fórmula se compone de un agradable spoiler, una luneta pequeña que continúa con un portón trasero sin demasiadas estridencias. A su vez, los faros ocupan más espacios en las zonas laterales que en la propia cola. Para terminar, en la zona inferior, una superficie en plástico negro simula una gran barra protectora como en los auténticos 4×4.

Unas barras de techo y quizá hasta unos estribos no le quedarían mal a este Kwid que, durante el período de pruebas que lo tuvimos, recogió más comentarios positivos que negativos en torno a su estética.

Diseño Interior:

En el habitáculo del Kwid nos encontramos con un nivel acorde al de los vehículos de su segmento y al de los productos que se elaboran en el Mercosur. Sin embargo, algunos detalles intentan elevar un poco el promedio y transmitir una sensación de mayor categoría.

Antes que nada, hablemos de espacios, pues su distancia entre ejes le brinda espacios suficientes para que cuatro adultos viajen cómodamente. Y eso no es para nada poco en este segmento. Sin embargo, su plaza trasera central es de menores dimensiones y por ello resulta ideal para un niño.

La posición de manejo tiene sus limitaciones. Es alta, como en los SUV, y permite tener una óptima visualización del camino. Para un conductor de estatura promedio no hay limitaciones. Pero el hecho de que la butaca no pueda ajustarse en altura hace que los que superen el metro ochenta, rocen su cabeza con el techo. Por otra parte, el volante, que no dispone de controles) no se ajusta ni en profundidad ni en altura. Otra limitación que debería mejorarse para una futura renovación del modelo.

Ahora regresemos a los estético. Si bien presenta una gran cantidad de plásticos rígidos, los encastres y terminaciones le cambian un poco la cara. A su vez, algunos toques sutiles mejoran la calidad percibida. Nos referimos a los detalles en piano back, con bordes cromados, sobre la plancha de abordo en un sector que agrupa la salida doble central del aire acondicionado, la pantalla multimedia de 7 pulgadas y los comandos del aire acondicionado. Por otra parte, los asientos traen tapizados que combinan material sintético con eco cuero, lo que brinda una sensación agradable de aspecto.

La capacidad del baúl, un aspecto muy tenido en cuenta por el comprador en este tipo de vehículos, es de 290 litros y está entre las mejores del segmento. Incluso rebatiendo los asientos traseros llega a los 1.100 litros. Un detalle para tener en cuenta: las plazas traseras pueden abatirse solo al 100 % y no en forma particionada.Debajo del piso del baúl en el interior del Kwid encontramos la rueda de auxilio que para nuestra sorpresa es homogenea a las 4 rodantes.

Vale la pena destacar, hablando de confort abordo, que solo dispone de levantavidrios eléctricos en las plazas delanteras y las puertas únicamente se destraban mediante un boton ubicado en la consola. No hay otra manera de hacerlo.

Instrumental:

El tablero de instrumentos es una combinación entre lo clásico y lo moderno. Es claro y de fácil lectura ya que cuenta con un fondo negro, números grandes en blanco y agujas en color naranja. Sobre la izquierda, medio círculo configura el cuentarrevoluciones y alberga a los testigos luminosos de aceite, temperatura, desempañador, entre otros. En el centro aparece un gran cuadrante circular para el velocímetro, marcando hasta los 180 km/h.

A la derecha, otra media circunferencia aparece en formato digital para indicar el nivel de combustible y diferentes informaciones del viaje como kilometraje parcial y total, consumos, autonomía, entre lo más importante.

En cuanto a su precisión, medida en cuatro oportunidades (a 80 km/h del velocímetro fueron 79 km/h reales; a 100 km/h del reloj, 99 km/h reales; a 120 km/h indicados, 119 km/h reales; y a 130 km/h de velocímetro, 129 km/h exactos), el promedio de error fue del 0,6%; dando un error muy bajo y cercano a la realidad.

Equipamiento:

El cliente de este tipo de vehículos se fija mucho en que trae y que le falta al vehículo, lo compara con sus competidores y busca siempre la mejor relación precio-seguridad. En el caso del Kwid, desde la entrada de gama incorpora aire acondicionado y un item que se destaca que es la dirección asistida eléctricamente. Además suma la radio doble DIN con USB/Bluetooth/Aux/iPod y apertura interna del baúl. Hasta ahí lo que incluye la versión Life.

La intermedia, Zen, a todo eso le adiciona cierre automático de puertas en rodaje, levantavidrios eléctrico delantero, encendido automático de luces interna, ciere centralizado a distancia, alarma de luces encendidas y espejo retrovisor fotocromático (es decir que evita que el conductor se encandile con las luces de los vehículos que vienen de atrás).

Intens agrega la frutilla del postre, una sistema multimedia con pantalla táctil de 7″ que trae las funciones Eco-coaching (le da consejos al conductor para que tenga una conducción en función del ahorro de combustible, lo más eficiente posible) y el Eco-scoring, mediante el cual califica a los que manejan. Esta opción suma también computadora de abordo, tacómetro, encendido automático de luces internas y apagado progresivo.

Iconic, la más full de todos, suma algunos elementos premium como la cámara de retroceso (sin sensores de estacionamiento), cierre centralizado remoto con apertura del baúl con comando en llave y tablero, y espejos exteriores eléctricos.

Renault ofrece una serie de interesantes accesorios para equipar al Kwid, como el deflector de lluvia, los embellecedor de puertas, sensores de estacionamiento traseros, one-touch, llantas de aleación de 14″, comando trabas eléctricas y protector de cárter, entre otros. Dispone de un solo limpiaparabrisas articulado que le permite tener un gran barrido a lo largo de una buena parte de la superficie vidriada delantera.

Seguridad:

Como dato fundamental en este rubro tenemos que decir que el Renault Kwid es el vehículo más accesible de la Argentina que incorpora cuatro airbags de serie, ofreciendo para todas las versiones un equipamiento superior al que exige la ley. A ello se le suma el sistema ABS de frenos obligatorio, que pudimos probar en las pruebas de frenada y esquive.

Cada una de sus versiones, además, cuentan con cinturones de seguridad delanteros con pretensionadores y regulación en altura, aunque debemos decir que no posee cinturón inercial para la quinta plaza. También está equipado con alerta visual y sonora en caso de cinturones no abrochados.

Mientras que los apoyacabezas delanteros están integrados al asiento, los traseros son ajustables y removibles. En la versión ZEN + agrega el de la plaza central así como también los faros antinieblas delanteros, careciendo de traseros. En Iconic suma la cámara de visión trasera con el lento oculto en el logo del rombo, que si bien puede ser considerado un elemento de confort, incide directamente en la seguridad para evitar choques en maniobras de marcha atrás.

Un punto relevante es el hecho de que este modelo que llega a nuestro país, fabricado en Brasil, recibió unos 140 kilos en refuerzos estructurales para proteger al habitáculo, a diferencia del producido en la India. De esta manera, el producto del Mercosur se pudo destacar en las pruebas de impacto del LatinNCAP, donde logró tres estrellas de protección para adultos y tres estrellas de protección para niños.

El informe emitido por el organismo que vela por la seguridad de los vehículos de la región, señala que la estructura de impacto lateral Kwid evitó la intrusión excesiva de la barrera de impacto lateral que, combinada con el airbag de tórax lateral, lograron mantener las lesiones de los adultos por debajo de alta probabilidad de riesgo de vida. Por su parte, los niños ocupantes mostraron una protección adecuada y buena durante las pruebas de impacto frontal y lateral gracias a que los Sistemas de Retención Infantil (SRI) se instalaron utilizando los anclajes ISOFIX y Top Tether que ofrece el auto.

Motor, caja y comportamiento:

Una de de las particularidades más destacadas de este auto es la incorporación de un motor SCE (Smart Control Efficiency) con block de aluminio, de apenas 998 cc, con doble árbol de levas a la cabeza, 3 cilindros en línea y 12 válvulas. Con este conjunto motriz, consigue erogar una potencia de 66 CV a 5.500 rpm y alcanza un torque máximo de 93 Nm a 4.250 rpm.

Dos de sus rivales directos presentan también motores de un litro. Por eso resulta apropiado compararlos para ver qué ofrecen en términos de prestación. El Volkswagen up! logra 75 CV a 6.200 rpm y 95 Nm a 3.000 rpm, mientras que el Fiat Mobi, 70 CV a 6.000 rpm y 94 Nm. La motorización está asociada a una caja manual de cinco velocidades, que presenta relaciones de marcha cortas. Esta sociedad motor-transmisión le proporciona al auto buenas reacciones a bajas revoluciones, pues en esto tiene mucho que ver su bajo peso (apenas 796 kilómetros) y su relación peso-potencia es de 11,8 kg/CV.

En nuestras pruebas de aceleración para alcanzar a los 100 km/h fueron necesario 13,71 segundos, que si lo comparamos con el Fiat Moby fue apenas 0,35 segundos más lentos y 3,93 más rapido que el Volkswagen up. En las pruebas de sobre paso resulto lento; para pasar de 80 a 120 km/h en 4ta velocidad fueron necesarios 20,87 segundos y en 5ta 28,82 segundos.

Cuando la velocidad de circulación es mayor se percibe en el habitáculo una mayor rumorosidad del motor, probablemente por sus tres cilindros que también hacen que haya una pequeña vibración que se percibe en el volante.

Desde fuentes oficiales de Renault señalan que el bajo consumo es su clave, incluso lo describen como el más económico de su categoría. En números concretos, aseguran que consume, en circuito mixto, unos 15,2 kilómetros por litro (6,5 l/100 km). Sometimos a nuestra pruebas de conusmo obteniendo muy buenos valores: circulando a 100 km/h demandó 5,4 l/100 km, mientras en ciudad fue de 8,1 l/100 km para recorrer la misma distancia, arrojando un promedio de 6,7 l/100 km/ cercano a lo emitido por la marca.

Las versiones superiores traen el programa Driving ECO2, a través del Media NAV 3.0. Este sistema evalúa si el conductor maneja de manera económica, y da consejo para un modo de manejo que reduzca el consumo y las emisiones. Vale la pena mencionar que el modelo también posee un indicador de marcha recomendada.

Toda la gama Kwid viene provista de una dirección asistida eléctrica (EPS) que, sumada a sus medidas compactas, le proporcionan las mejores condiciones para desempeñarse en ciudad, en espacios reducidos  y en maniobras de estacionamiento. Además, se endurece progresivamente a medida que a aumentamos la velocidad para ofrecer mayor confort.

Su despeje al suelo de 18 centímetros, además de otorgarle un aspecto de Sport Utility, lo beneficia para sortear pozos, cunetas, lomos de burro en las calles. Además, las suspensiones fueron reguladas para ofrecer un gran confort. Si bien estamos en presencia de un vehículo city car, sus ángulos de entrada (25°) y de salida (42°) le brindan mejores condiciones que un auto convencional para desempeñarse en caminos irregulares fuera del asfalto. Yendo a la ruta, este tipo de vehículos sabemos que se ve más afectado al disponer de suspensiones más comfortables para ciudad, lo que repercute en rolidos un poco más acentuados y se ve afectado por los vientos cruzados o laterales. En la ciudad se mostró con un comportamiento ágil, saliendo muy bien desde abajo.

La unidad analizada contaba con frenos delanteros a discos ventilados y a tambor traseros. En nuestras pruebas de frenado de 100 km/h necesito 41,2 metros para detenerse completamente, un valor algo alto si consideramos su bajo peso.

Precio:

Los precios de la gama Kwid vigentes al mes de diciembre de 2017 son los siguientes: Iconic ($249.000), Intense ($243.00), Life ($224.000) y Zen ($232.000). La garantía para este producto es de tres años o 100.000 kilómetros. Para tener un parámetro de su rango de precios decidimos comparlo con dos de sus rivales directos dentro del segmento de los autos compactos o city cars. Con ellos comparte también la motorización de 1 litro.

El Volkswagen Up! tiene una amplia gama que parte de los $213.000 de la versión 3 puertas Take AA a los $324.000 de la Pepper TSI. Por su parte, el Fiat Mobi, arranca en los $233.000 de la opción Easy y culmina en los $258.000 de la Way.

En cuanto a los services programados, aún no contamos con los valores del Kwid, pero tomamos como referencia los precios actuales de los mantenimientos del Clio Mio: 10.000 km ($3.790), 20.000 km ($4.010), 30.000 km ($3.790), 40.000 km ($5.440) y 50.000 km ($3.790).

A continuación detallamos el cuadro con prestaciones y consumos:

Valores obtenidos con nuestro equipo de medición de performance
Aceleración
0 a 100 km/h	13,71 seg	245,19 m
0 a 100 m	7,79 seg	74,30 km/h
0 a 200 m	12,05 seg	94,42 km/h
0 a 300 m	15,62 seg	107,50 km/h
0 a 400 m	18,86 seg	115,39 km/h
0 a 1000 m	35,59 seg	143,52 km/h

Consumo
Velocidad	Régimen motor	Consumo	Autonomía
a 100 km/h	3.200 RPM	5,4 l/100km	925 km
a 120 km/h	3.800 RPM	6,8 l/100km	735 km
a 130 km/h	4.200 RPM	8,3 l/100km	602 km
Urbano		8,1 l/100km	617 km

Recuperación de 80 km/h a 120 km/h
En 4ta	20,87 seg
En 5ta	28,82 seg

 

Diseño original	Posición manejo sin regulación
Mejora en las pruebas de choque	Solo alzacristales eléctricos delanteros
Capacidad de baúl	Valores de reprise altos
Consumo	Sensible a vientos laterales
Cuatro airbags de serie	Cinturón abdominal 5to pasajero
Relación precio-producto	Falta de antiniebla trasero
Sistema multimedia
Error de velocímetro bajo

Características Renault Kwid Iconic
Motor	3 cilindros
Cilindrada en cm3	999
Potencia CV/rpm	66/5.500
Par máximo kgm/rpm	9,4/4.250
Velocidad máxima km/h	147 en 5ta a 4.700 rpm
Peso en kg	790
Capacidad tanque de combustible en litros	35
Capacidad de baúl dm3	290
Neumáticos	165/70R-14
Consumo a 100 km/h	5,4 litros/100 km
Consumo a 130 km/h	8,3 litros/100 km
Consumo urbano	8,1 litros/100 km
Precio en pesos	249.200
Garantía	3 años o 100.000 km