La red comercial de Quick Lane no para de crecer y a cinco años de su llegada a nuestro país, la compañía respaldada por Ford inauguró su vigésimo segundo centro de servicios, en este caso en el barrio porteño de Parque Patricios.
Ubicado en la Avenida Amancio Alcorta 2353, esta sucursal posee instalaciones de 400 metros cuadrados cubiertos, alineados a los estándares arquitectónicos y técnicos de los centros Quick Lane globales. El local cuenta con cuatro bahías de servicio, una alineadora 3D de última generación y una sala de espera de 50m2 completamente equipada con aire acondicionado, Wi-Fi y otras comodidades. Además, permite visualizar en todo momento el proceso de reparación de los vehículos de los clientes.
Al igual que los otros centros de la compañía en el país, en el local de Parque Patricios se pueden realizar operaciones de mantenimiento y mecánica ligera como frenos, baterías, neumáticos, tren delantero, alineación, balanceo, amortiguadores, cambio de aceite y filtros. Se atienden vehículos de todas las marcas y se utilizan repuestos de la firma Motorcraft, por lo que se pueden realizar servicios oficiales de Ford.
Los centros de Quick Lane ya abarcan todo el país y entre sus principales ventajas se destacan los precios competitivos de mercado, instalaciones y equipamiento adecuado para realizar las operaciones antes mencionadas junto con personal capacitado y a diferencia de muchos talleres, no requiere solicitar turno previo para realizar los trabajos de mantenimiento y reparación.
Según el comunicado oficial, desde su desembarco en Argentina –a finales de 2013-, para este año contará con más de 24 sucursales en todo el país, que se suman a las más de 700 en Estados Unidos y otras 1000 a nivel global.
