Direzione Cor Tauri, bajo esta denominación, Lamborghini seguirá los pasos de prácticamente todas las automotrices y particularmente de su principal rival, Ferrari. La firma italiana se prepara para iniciar la transición hacia la electrificación total pero a su manera, lo que incluye una espectacular y prometedora despedida de los motores de combustión, pero afortunadamente, aún quedan varios por delante escuchando el rugir de los V10 y V12 de la compañía.
La casa de Sant’Agata Bolognese presentó este martes su plan de electrificación para el que realizará la mayor inversión en su historia, nada menos que 1.500 millones de euros en los próximos cuatro años y que abarca desde las líneas de producción hasta las oficinas. Semejante despliegue se realizará en tres etapas que culminarán con la presentación del primer superdeportivo 100% eléctrico de la marca y esta es precisamente la parte más interesante del plan.
La buena noticia para los más puristas es que los propulsores V12 serán despedidos como corresponde: la primera etapa, denominada “Homenaje al motor de combustión” se llevará a cabo entre 2021 y 2022 e incluye el desarrollo de propulsores de combustión para versiones que rendirán homenaje a la historia de la marca. En ese sentido, este mismo año se anunciarán dos nuevos productos impulsados por motores V12.
Para 2023, se iniciará la segunda etapa, denominada “Transición híbrida”, que como su nombre lo indica, incluye la incorporación de un motor eléctrico para complementar y asistir al propulsor de combustión. El primer híbrido –sin contar al Sián de 819 CV- será presentado en 2023 y un año después, Lamborghini promete electrificar su gama completa, posiblemente con sistemas híbridos enchufables y mild-hybrid. A esta altura, la compañía prevé reducir un 50% de las emisiones de CO2 de sus autos.
Por último, la tercera etapa, prevista para 2025 estará marcada por la presentación del primer vehículo 100% eléctrico de la firma italiana. Por el momento, sólo se conoce un teaser que lo muestra con una lona cubriendo su carrocería, que si bien no revela su diseño, por sus formas se trataría justamente de un superdeportivo y no de un SUV. Desde Lamborghini prometen que “la innovación tecnológica en esta fase estará orientada a garantizar unas prestaciones remarcables y a posicionar al nuevo producto en lo más alto del segmento”.
Más allá de esta revolución, de este antes y después para la marca, desde la casa de Sant’Agata Bolognese hacen hincapié en que sus valores se mantendrán: “Las prestaciones y la experiencia de conducción de un auténtico Lamborghini seguirán siendo la prioridad para los ingenieros”, aseguraron en el comunicado oficial.