De caminar al borde del precipicio a ser una de las empresas más grandes y con mayor rentabilidad a nivel mundial. Esa es la realidad actual del Grupo PSA que luego de adquirir Opel y Vauxhall a General Motors, en sólo un año logró revertir una delicada situación económica de más de una década con balances negativos a obtener importantes ganancias. Ahora, enfocada en uno de los pilares de su éxito –los Vehículos Utilitarios Livianos o VUL’s-, el consorcio francés se prepara para dar su próximo paso.
Mediante un comunicado oficial, PSA anunció que próximamente comenzará a producir utilitarios en la planta de Gliwice (Polonia), donde actualmente se fabricaba el Opel Astra. Este centro industrial complementará a la fábrica de SevelSud en Val di Sangro, Italia, que superó su capacidad de producción en los últimos tres años al encargarse de fabricar los Peugeot Boxer, Citroën Jumper y Fiat Ducato como parte del histórico joint venture entre el Grupo PSA y el Grupo FCA que ya fue renovado y continuará al menos hasta 2023.
Esta expansión resulta clave ya que en un corto plazo también se sumarán a estos tres modelos, los Opel/Vauxhall Movano que compartirán plataforma con sus pares de Peugeot y Citroën. Para ello, el consorcio francés realizará una importante inversión en Gliwice para transformar y adaptar la planta para la llegada de estos utilitarios, aumentando su capacidad de producción a 100.000 unidades por año.
Al respecto, Yann Vincent, Vicepresidente Ejecutivo de Industria y Logística de Groupe PSA, destacó: “Esta es una buena noticia para la fábrica de Gliwice y demuestra que nuestro programa ‘Fábrica Excelente’ se está implementando en toda Europa con sinergias y eficiencia. El desempeño industrial será una palanca esencial al servicio de nuestras ambiciones en el mercado de los vehículos utilitarios y nos permitirá garantizar a nuestros clientes la mejor oferta del segmento para todas nuestras marcas”.
Por su parte, Andrzej Korpak, Director de la fábrica de Groupe PSA de Gliwice, señaló: “Acoger la producción de furgones de gran tamaño es una etapa esencial para el futuro de la fábrica y un desafío importante para alcanzar los mejores niveles de eficiencia y calidad para satisfacer a los clientes empresariales. Vamos a demostrar en los próximos años nuestra capacidad de adaptar nuestros procesos a la producción de ese tipo de vehículo y estaremos a la altura de la confianza que nos ha sido depositada”.
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