Al igual que una anterior llamada a revisión que afectó a unidades fabricadas entre 2015 y 2017 por la posibilidad de apertura espontánea del portón trasero, FCA extendió la campaña a 115 unidades de su pick up full size modelo 2018, a las que se les incorporarán un limitador de cierre. El trabajo se realizará de manera gratuita a partir del 3 de junio mediante turno previo en su red de concesionarios oficiales.
Mediante un aviso publicado en los diarios, la compañía llamó a revisión a varias unidades de su B-SUV fabricadas entre 2017 y 2018 por una falla en la soldadura de las parrillas de suspensión. El reemplazo de las mismas se realizará a partir de agosto mediante turno previo en su red de concesionarios y talleres oficiales.
Es por un problema en el sistema de control electrónico (PCM) que podría emitir niveles de óxido nitroso más altos que los establecidos, por lo que se procederá a reprogramar este módulo de manera gratuita. El trabajo demora alrededor de media hora y se realizará a partir del 25 de marzo mediante turno previo en cualquier concesionario de la red oficial Chrysler-Jeep-Dodge-RAM.
Es por problemas en el inflador del airbag del pasajero y afecta a unidades fabricadas entre 2014 y 2016, por lo que se reemplazará dicho elemento de manera gratuita. El trabajo demora alrededor de 2 horas y se realizará a partir del 11 de febrero mediante turno previo en cualquier concesionario de la red oficial Chrysler-Jeep-Dodge-RAM.
Es por la posibilidad del desacople del eje intermediario de la columna de dirección, por lo que la marca procederá a reemplazar la pieza de manera preventiva y gratuita en su red oficial. El llamado a revisión es sólo para unidades fabricadas este año y el trabajo demora aproximadamente una hora, mediante turno previo.
Es por la posibilidad de degradación del inflador del sistema de airbags ante la exposición del vehículo a altas temperaturas o elevados niveles de humedad. La campaña afecta a 4.431 unidades entre los tres modelos, fabricados entre 2012 y 2013. La revisión y/o reparación de este inconveniente puede demorar hasta 2hs y se coordina mediante un turno previo en las concesionarias.
En el caso del B-SUV, el llamado a revisión afecta a unidades fabricadas este año y es para realizar un purgado preventivo en el sistema de frenos, mientras que en el sedán –sólo para unidades fabricadas en 2008- es para reprogramar la unidad SRS de los airbags laterales. Los trabajos se realizan sin cargo en la red de concesionarios y servicios oficiales de la marca.
Es por la posibilidad de apertura espontánea del portón trasero con el vehículo en movimiento. La campaña afecta a 170 unidades de las dos variantes de la pick up full size de la firma estadounidense, fabricadas entre 2015 y 2017. La revisión y reparación de este inconveniente demora alrededor de 30 minutos y se coordina mediante un turno previo en las concesionarias.
Es por la posibilidad de existencia de burbujas de gas en el fluido del sistema de frenos. El llamado a revisión afecta a 38 unidades del Journey (año/modelo 2018) y 383 unidades del Compass (año/modelo 2019).
La marca japonesa lanzó la segunda etapa de su campaña de recall masivo para revisar y reemplazar (de manera gratuita) y en caso de ser necesario, el sistema de inflado de airbags provisto por la firma Takata. En Argentina quedan alrededor de 68.000 unidades afectadas. Para identificar si una unidad se encuentra afectada, se puede ingresar el número de chasis en la web oficial de Honda.
La marca japonesa llamó a revisión a unidades de la Grand Vitara J24B producidas entre 2008 y 2013 por una posible falla en el funcionamiento del selector de marchas. El chequeo y eventual reemplazo de la pieza se realiza sin cargo en los talleres oficiales.
