El Golf es el producto más vendido y más representativo del portfolio actual de Volkswagen, un modelo clave para la marca especialmente en Europa y precisamente una de las versiones que no pueden faltar en el portfolio es la rural por lo que además de presentar la actualización del hatchback, la firma de Wolfsburg también develó al Golf Variant 2024, una puesta al día que le va a permitir seguir compitiendo en uno de los pocos segmentos que en el Viejo Continente parece resistirse al avance de los SUV.
A nivel estético, la versión familiar hereda las mismas modificaciones del hatchback. Los cambios son leves aunque llegan a percibirse: los faros son más finos y recibieron un sutil retoque en su interior. El diseño del paragolpes varía de acuerdo a la variante o al nivel de terminación elegido, entre los que sin dudas se destaca la opción R-Line, con un aspecto mucho más agresivo en el que se destacan las grandes tomas de aire y la máscara negra que las envuelve.
De perfil mantiene el clásico diseño de las rurales de Volkswagen, por lo que resulta similar a su hermano mayor, el Passat Variant. Sólo recibió nuevas llantas de aleación, mientras que en la parte trasera los faros también adoptaron un formato más fino que se extiende sobre el portón y una nueva firma luminosa más llamativa, que puede ser personalizada por el usuario.
Puertas adentro, toda la plancha frontal fue rediseñada y además del instrumental digital actualizado, ahora con un display de 10,25 pulgadas, se destaca especialmente la enorme pantalla táctil de 12,9” ubicada sobre la consola central para el sistema multimedia. Es la gran protagonista del renovado interior y permite acceder a un sinfín de funciones. Sin dudas su innovación más importante es la incorporación de tecnología de inteligencia Artificial y el ChatGPT integrado. Con esta mejora, los ocupantes podrán dialogar de una manera más intuitiva e interactuar con el vehículo, ya no sólo dándole órdenes simples como encender el climatizador, sino responder cualquier otra pregunta. Esto no significa que deja por completo el ya de por sí avanzado asistente de voz IDA, sino que lo complementa.
Al igual que en el hatchback, toda la gama de motorizaciones fue revisada y actualizada. Las versiones más accesibles están impulsadas por el motor naftero 1.5 TSI de 115 o 150 CV, ambos con caja manual de 6 marchas. Le sigue dos opciones mild-hybrid de 48V, también con el 1.5 eTSI de 115 y 150 CV pero en este caso con la caja automática DSG de 7 marchas. Entre las opciones diésel, hay dos alternativas con el conocido 2.0 TDI, de 115 CV con caja manual de sexta o de 150 CV con caja DSG de séptima. En este caso, no se ofrece la versión deportiva GTI ni las opciones híbridas enchufables, la que sí está confirmada para más adelante es la más extrema de todas, la R, que será presentada durante el año, con más de 330 CV y tracción integral.
El Golf Variant busca demostrar que las rurales aún merecen su espacio: con el mismo comportamiento dinámico del hatch y sus mismos atributos, sobresale por su plus de espacio, con un baúl de 611 litros que puede ampliarse hasta los 1.620 litros rebatiendo los asientos.