Toyota sigue generando expectativas con la tercera generación de su icónico deportivo, el Supra. Luego de presentar un prototipo en el pasado Salón de Ginebra, ahora decidió llevar la versión definitiva al tradicional Goodwood Festival of Speed… pero jugando al misterio una vez más: la unidad que giró por el circuito mantenía un camuflaje que sólo dejaba ver parte de su diseño.
Dentro de lo que se puede apreciar en las imágenes oficiales, el A90 (tal como se denomina internamente a esta nueva generación), mantiene gran parte de los rasgos estéticos del prototipo, con una sector frontal alargado y en forma de V, un habitáculo tirado hacia atrás y un remate posterior algo parecido al del GT-86, que se convertirá en su hermano menor. Otro detalle que llama la atención son las luces de Led frontales y el diseño de su línea de cintura, inspirado en el GT-2000 de fines de los 60.
De lo que aún no hay información ni fotografías es de su interior, aunque estimamos que contará con los últimos avances desarrollados por la marca en materia de conectividad.
Tampoco hay muchos datos precisos acerca de su mecánica, pero sí se sabe que el Supra está siendo desarrollado en conjunto con el BMW Z4 con el que compartirá su plataforma y motorización de 6 cilindros en línea, aunque con ajustes específicos realizados por los ingenieros de la firma nipona para diferenciar a ambos productos. Se habla de una potencia que rondaría los 335 CV, más otro motor –para la versión de entrada de gama- de cuatro cilindros y 250 CV. Inclusive, teniendo en cuenta la importancia que le da Toyota a su tecnología híbrida, no se descarta una variante de este tipo para más adelante.
A esta seguidilla de incógnitas, se suma la más importante ¿Cuándo se presentará la versión definitiva sin ningún tipo de camuflaje? La marca japonesa mantiene silencio absoluto al respecto, sin embargo, algunos medios europeos señalan que podría darse antes o durante el Salón de París, que se realizará en octubre de este año.