El ID.3 revolucionó la gama de Volkswagen, dando origen a una nueva familia de vehículos 100% eléctricos desarrollados a partir de la plataforma modular MEB y con una demanda récord, acumulando decenas de miles de pedidos a las pocas horas de ser develado. Aunque su presentación parece reciente, ya pasaron casi tres años de aquel momento y ya es tiempo de su primera actualización, tal como lo venía anticipando la propia marca.
Con leves cambios estéticos, mejoras en el interior y en su eficiencia, el renovado ID.3 promete suplir las críticas o falencias de la primera serie, con el objetivo de seguir acrecentando su propio éxito y el de la gama ID. Comenzando por su diseño, la principal modificación se observa en el sector frontal, con un paragolpes que ostenta un estilo más deportivo, con una toma de aire de formato trapezoidal con una máscara negra en lugar de entramado con perforaciones del modelo actual. Hacia los extremos posee dos canalizadores de aire en forma de C que además de mejorar su aerodinámica, subrayan el ancho del vehículo. No hay cambios en los faros (opcional con tecnología Matrix Led) pero sí en el capot, con trazos más marcados y la eliminación del aplique de color negro que servía como nexo con el parabrisas.
De perfil las novedades serían aún más leves: se quitó el adhesivo de color aluminio del pilar C y el marco de las ventanillas incorpora un aplique cromado. Dependiendo de la versión, puede contar con llantas de aleación de nuevo diseño, mientras que en la parte trasera los faros ahora lucen una firma luminosa en forma de C.
Puertas adentro también hay algunos cambios: respondiendo a una de las principales críticas, el ID.3 incorpora nuevos materiales de mayor calidad, superficies soft-touch y nuevos colores para los revestimientos. Mención aparte para la nueva pantalla de 12 pulgadas del sistema multimedia y mejoras tecnológicas como actualizaciones OTA –a distancia- y más sistemas de asistencia a la conducción como el Travel Assist (control de crucero adaptativo que además puede controlar la dirección para seguir en el carril correspondiente). Como todos los últimos productos de VW, también dispone de un sistema de iluminación ambiental personalizable. El instrumental es 100% digital, con una pantalla de 5,3 pulgadas complementada por un Head-Up Display con tecnología de realidad aumentada.
Mecánicamente si bien mantiene la motorización de 204 CV (150 kW) y 310 Nm de torque, las baterías recibieron un ajuste en la gestión energética, mejorando su eficiencia y rendimiento. El ID.3 2024 se ofrecerá en dos versiones, PRO con tracción trasera y batería de 58 kWh de capacidad, que le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos, alcanzar una velocidad máxima de 160 km/h (limitada electrónicamente) y una autonomía de 426 kilómetros. La otra alternativa será la versión PRO S, con baterías de 77 kWh, aceleración de 0 a 100 km/h en 7,9 segundos, misma velocidad máxima y una autonomía que se amplía hasta los 546 kilómetros según el ciclo WLTP. Por supuesto dispone de frenado regenerativo y selector de modos de conducción para priorizar la eficiencia, el confort o las prestaciones. En cuanto a tiempos de carga, si se utiliza un cargador rápido –de hasta 170 kW- puede recuperar del 5 al 80% en apenas 30 minutos. Para más adelante está prevista la llegada de una versión más accesible y de menor capacidad.
El arribo del renovado ID.3 a los concesionarios europeos está previsto para los próximos meses, con un precio a definir pero con los planes de producción muy claros: debido a la altísima demanda, el hatchback eléctrico ya se fabrica en las plantas alemanas de Zwickau, Dresde y pronto lo hará también en Wolfsburg y en Anting, en este caso para el mercado chino.
