La Tiguan AllSpace que se renovó el año pasado en nuestro mercado ya tiene prácticamente los días contados y es que Volkswagen tiene lista a su sucesora, que podría pasar a llamarse Tayron o Tiguan L Pro según el mercado. Así lo demuestran las imágenes que llegan desde China anticipando su inminente presentación.
Una vez más, el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información de aquel país fue quien terminó filtrando las fotos de este nuevo producto, que en un vistazo rápido luce idéntico a la nueva generación de la Tiguan. Sin embargo, observándolo más minuciosamente, la puerta trasera es levemente más larga que el modelo europeo y las dimensiones así lo confirman. La Tiguan L Pro –nombre con el que será comercializada en el Gigante Asiático, mide 4,74 metros de largo, 1,86 de ancho y 1,68 de alto, siendo por lo tanto 20 centímetros más largo, 2 cm más ancho y 2 cm más alto que la versión de 5 plazas. Mención aparte para la distancia entre ejes, que pasa de 2,67 metros a 2,75 metros, diferencia que se hará notar en la habitabilidad en las plazas traseras y a la vez permite la incorporación de dos asientos adicionales para seguir ofreciendo una capacidad para 7 ocupantes.
Estéticamente, no hay diferencias con el modelo europeo. Su diseño refleja claramente el recambio generacional, dejando de lado los trazos rectos por líneas algo más redondeadas e inspiradas en el ID.4, especialmente en el sector frontal, como el formato de los faros –con una firma luminosa que se extiende sobre la parrilla, más fina que en el modelo actual y del paragolpes, con una enorme toma de aire que se extiende a lo ancho y dos canalizadores de aire en los extremos. Dependiendo de la versión puede contar con detalles cromados, más partes en color carrocería o una suerte de máscara de color negro más deportiva para la variante R-Line. De perfil también evidencia líneas más redondeadas y con cierto aire a la Touareg, mientras que en la parte trasera los faros tienen un diseño más horizontal y un aplique que se extiende sobre el portón, uniéndolos bajo un acrílico traslúcido.
Puertas adentro, si bien no hay imágenes por el momento, también debería ser igual a la versión de 5 pasajeros. La nueva Tiguan producida refleja un gran salto respecto al modelo actual, con un diseño más tridimensional del tablero y un gran despliegue tecnológico: el protagonismo de la plancha frontal se lo llevan las pantallas, una para el instrumental –de 10,25”- y la otra de 12,9 o hasta 15” tipo tablet flotante para el sistema multimedia, todas enmarcadas con un aplique en Piano Black que las une a las salidas de aire. Otra reminiscencia a la gama ID es que la selectora de marchas fue desplazada a la columna de dirección, mientras que su lugar anterior en la consola, ahora lo ocupa una perilla circular para operar el sistema de infoentretenimiento y varias configuraciones de los modos de conducción y personalización. Por último, el volante el similar a los últimos productos lanzados por la forma de Wolfsburg, pero afortunadamente recupera los mandos físicos en lugar de los comandos táctiles.
Interior de la Tiguan europea de 5 plazas.
Por ahora no hay datos sobre su gama de motorizaciones, aunque prácticamente damos por hecho que estará basada en el ya conocido 2.0 TSI, que en la versión de 5 plazas está disponible con 204 CV y 320 Nm de torque o 265 CV y 400 Nm de par, ambos con tracción integral 4Motion y la caja automática DSG de 7 marchas. También debería incorporar versiones híbridas enchufables. En ese sentido, la Tiguan cuenta con dos opciones que combinan el 1.5 TSI con un motor eléctrico y una batería de iones de litio de 19,7 kWh de capacidad. Una de ellas desarrolla 204 CV y 350 Nm de par y la otra, 272 CV y 400 Nm de torque, las dos asociadas a la caja automática DSG de 6 marchas. La autonomía en modo eléctrico es de 100 kilómetros.
Respecto a su denominación y planes de producción, en China se llamará Tiguan L Pro, mientras que en el Viejo Continente, para diferenciarla de la versión de 5 asientos, se denominaría Tayron. Su fabricación ya está confirmada en las plantas de Changchun y Anting (China), Wolfbsurg (Alemania y en Puebla (México), desde donde arribará a nuestro país, seguramente hacia 2025.
